Ahora que las vacaciones de verano llegaron y muchos abuelos se quedan al cuidado de los nietos, es una buena oportunidad para reactivar las relaciones intergeneracionales.

El periodo vacacional es buen tiempo para planear actividades de convivencia y evitar crisis de qué hacer juntos nietos y abuelos, explicó Guadalupe Díaz González, Jefa del Centro Metropolitano del Adulto Mayor (CEMAM) de DIF Zapopan.

“Se requieren encontrar puntos en común o afines, de intercambio, en donde, como en cualquier relación bilateral, la persona más sociable o con más iniciativa es quien propone una actividad”, comentó.

A fin de que estos encuentros funcionen mejor, es importante organizarse tomando en cuenta:

· La creatividad y curiosidad natural de los niños para actividades de aventura, como: Salir de paseo a conocer la ciudad por lugares que los adultos mayores frecuentaban de niños.

· El conocimiento de los jóvenes en las nuevas tecnologías y juegos de mesa modernos, que pueden enseñar a los mayores; así como armar coreografías musicales actuales.

· La iniciativa de los adultos mayores y su experiencia en: Jardinería, cuenta cuentos y leyendas, manualidades, juegos tradicionales y recetas de cocina familiares.

· Evitar las limitaciones y cuestionamientos como, el por qué y para qué.

· La intervención de una tercera persona para que sume a las generaciones (padres de familia, vecinos, líderes de grupos sociales).

La Jefa del CEMAM afirmó que, cuando un adulto mayor participa en actividades intergeneracionales, sale del aislamiento, le proporciona un beneficio social y psicológico al tener contacto con otras personas.

Mientras más completa es la actividad, mayores áreas se estimulan, como la física, cognitiva, psicomotriz, para lo cual es recomendable que cada actividad con adultos mayores dure alrededor de 45 minutos.