El periodo vacacional está con concluir, para algunas familias el regreso a clases implicará un cambio en el estilo de vida, como las niñas y niños que pasarán de la guardería a la primaria, de acuerdo a la Jefa de Centros de Atención de DIF Zapopan, Rosa María Guzmán Torres.
“Si bien los niños de los Centros de Desarrollo Infantil (CDI) de este Sistema, salen con el preescolar finalizado, listos para integrarse a la primaria, con los documentos oficiales que pide la Secretaría de Educación Pública (SEP), el cambio es difícil, sobre todo en la rutina”, comentó la Jefa de Centros de Atención.
Es normal que pueda presentarse una crisis de miedo e incertidumbre a lo desconocido, por lo que Guzmán Torres, enfatizó la necesidad de que los padres de familia contemplen esta situación con anticipación y platiquen de dicho cambio con sus hijos.
“Avisarles que verán nuevos niños y maestros, en un edificio diferente, pero que podrán tener nuevas amistades; hacerlos sentir acompañados en el proceso”, dijo.
Agregó que, para un niño que ha pasado hasta 5 años y medio en la guardería representa un cambio drástico; sin embargo, los padres de familia pueden hacer que este proceso salga adelante.
“En el jardín de niños se manejaba la metodología del juego, ahora en la primaria habrá tareas y situaciones académicas de mayor formalidad, se enfrentarán a dictados y a nuevas materias. Sobre todo a horarios diferentes”, señaló.
Ante esta situación el DIF Zapopan propone a los padres de familia hacer un plan de nuevo estilo de vida por escrito, el cual puede incluir los puntos más relevantes e incluso programarse por horarios:
1.- Que el niño duerma al menos 8 horas durante noche.
2.- Planear con las redes de apoyo (abuelos, tíos) horario para recoger al niño, si es que los dos padres trabajan.
3.- Dejar listos los uniformes y útiles escolares una noche antes.
4.- Prever el horario para levantarse para evitar retrasos.
5.-Contemplar un tiempo para que el niño desayune (en lo posible que no ingiera alimentos en el camino, o deprisa).
6.-Preparar el refrigerio (lunch), puede ser una noche antes con la refrigeración adecuada.
7.-Destinar un tiempo para apoyarle en las tareas escolares.
8.- Preparar un día antes material que haya sido solicitado al niño por su escuela.
9.-Programar un espacio en la tarde para que el niño juegue.
10.-Platicar con el niño cómo fue su día en la escuela.
Sin duda la rutina de la familia tendrá cambios, y para los niños será más grande, ya que sus horarios de alimentación, siesta y tareas se moverán. En general, familia nuclear (padres e hijos), redes de apoyo (abuelos, tíos) y niños, requieren organizarse para enfrentar de manera positiva esta nueva etapa de vida.